Pasaron cientos de amaneceres, muchos amargos y otros felices, cobijo solo en mi ser esas tres estrellas que me mandó el cielo, les voy labrando el camino uno a uno con excelentes resultados, resultados que dan orgullo y veo el reflejo de lo que he hecho a través de una vida pesada y con un camino sinuoso, no soy ni la más exitosa pero tampoco la más fracasada. Solo pienso en esos amaneceres dónde cada día me voy preguntando que voy a hacer hoy para salir adelante, para que lo que estamos viviendo sea el resultado de muchos sacrificios. Por eso hoy pensé en tí, y me pregunté a mi misma, es bueno traerte a mis sentimientos y emociones?, creo que el recordar, inspirar, conseptualizar y plasmar dentro de mis pensamientos todo lo que has hecho por mí a través de la vida, me hace darme cuenta que cada minuto que haya pasado y que ya no estás presente y después logro tenerte presente, es sinónimo de buena esperanza, de saber que estás ahí es solo de que te llame.
A veces me da pena decirte que me siento estancada, en ocasiones mejor para qué hablarte si mi ánimo es triste y obscuro, pero después reflexiono y me doy cuenta que no hay mejor manera que volver a hacer fluir los caminos y volver el ánimo blanco cuando recuerdo que de cualquier forma estás ahí, siempre conmigo.
Te extraño tanto, te necesito tanto que quisiera gritar y hacerte ver que me haces falta, sin embargo cuando estás, te haces presente en mi vida, tomo más fuerzas para vivir.
Para tí quien quiera que seas, para tí mi amigo, para tí el amor, para tí mi Dios, PARA TÍ.
